perro conoce a bebé

Descubriendo a mi hermano humano

Si estás esperando un bebé y no sabes cómo gestionar la presentación con tu perro y los primeros días de convivencia juntos, este post te interesa.

PRESENTACIÓN ENTRE PERRO Y BEBÉ

Si estás esperando un bebé y no sabes cómo afrontar la presentación con tu perro, aquí encontrarás los consejos necesarios para hacer que este momento sea el inicio de una convivencia adecuada entre tu perro y tu recién nacido. La presentación entre el perro y el bebé puede marcar un antes y un después, por lo que es importante que sea una experiencia positiva para ambos. 

Permíteme decirte que este momento en el que Dólar y Bela conocieron a su hermano humano Álex con tan sólo 2 días de vida, es uno de los más especiales de mi vida. 

Fue maravilloso (luego podrás ver el vídeo y el análisis, porque hay fallos en él).presentación perros y recien nacido creciendo entre perros tamara hernán

Con mi experiencia me gustaría poder arrojar luz sobre una visión actualizada y veraz. Nada de tutoriales en escenarios ficticios ni de ideas sociales jerárquicas.

Mi visión de la crianza multiespecie considera a cada perro como parte de la familia. Son un miembro más y tenemos el deber de conocer sus necesidades y adaptar las actuaciones que hagamos a ellos. Así como de hacerles protagonistas de un momento tan especial como es el de la llegada de un bebé.

Esta fue nuestra realidad sin cortes del 24 de mayo de 2019: Es el momento de la presentación entre mis perros y mi bebé.

Pero me voy a atrever e darte un consejo

Cada familia es única y especial. Haz de este momento, un momento tuyo. Puedes prepararlo y ensayarlo, pero llegado el gran día, disfrútalo. 

Aunque no se note en el vídeo, mi corazón iba a mil por hora y era un manojo de nervios aún con los calmantes que me había tomado para los dolores. 

Antes de analizar mi vídeo, te lanzaré unas pautas básicas para la presentación entre tu perro y tu recién nacido. 

PAUTAS PARA LA PRESENTACIÓN

  • Mejor en el exterior: Intenta que la presentación entre el perro y el recién nacido se produzca fuera del hogar, si bien no puede ser en plena calle, puedes utilizar una zona intermedia como el jardín de tu casa, un porche o un portal. Pero siempre que puedas, el exterior es la mejor opción. Sin embargo, aún en muchos blogs se sigue viendo la imagen del recién nacido y la mamá entrando por el salón de casa. Pues bien, los perros son territoriales y de eso no hay duda. Su hogar es SU HOGAR, y las presentaciones con otros miembros (perros o humanos) serán más llevaderas y tendrán más posibilidad de que vayan bien en un espacio neutro. ¿Quedarías con una persona que acabas de conocer en tu casa? ¿Sientes comodidad y confianza con una persona que entra a tu casa a revisar la caldera?. Aunque insisto, tú mejor que nadie conoces a tu perro. Si crees que se va a sentir más tranquilo y seguro en casa, la decisión final es tuya. Mi trabajo como experta es plantearte los pros y contras de cada opción y dentro de la experiencia que tengo con otras familias, la opción que mejor suele resultar. 
  • Relajados antes de conocerse: Lo mejor para que una presentación entre perro y bebé salga bien es que el bebé esté dormido y tu perro calmado. Y esto dependerá de varios factores, pero uno de peso es dónde haya pasado los días previos a la presentación entre el perro y el bebé durante vuestra hospitalización. No será lo mismo un perro que viene de un chenil de una residencia canina, que el que se queda acompañado por un familiar en su propia casa, o solo si tiene ansiedad por separación. Lo ideal es que uno de los dos o un ayudante,  le saque a pasear al menos 20 minutos y haga algún ejercicio que le haga concentrarse y estar tranquilo (olfato, por ejemplo). ¡Lo que viene a continuación va a ser una explosión de emociones y le necesitamos lo más relajado posible!
  • Saludos antes del encuentro: Tómate tu tiempo para saludarle antes de hacer la presentación entre tu perro y tu bebé. Cuanto más relajado esté mejor, y si aún está excitado, no podrá pensar con la misma claridad. 
  • El pequeño humano a su altura: Todos hemos visto demasiadas veces esa escena de mamá o papá con el bebé en brazos ofreciéndoselo al perro prácticamente a la cara. No lo hagas. Aunque puede haber excepciones en las que sólo quede la opción de presentar al perro y al bebé en brazos de uno de sus progenitores, lo mejor es que puedas bajar el cuco o la silla del coche al suelo y junto con tu supervisión y acompañamiento, dejar que tu perro decida lo que hacer. Si se quiere acercar a olerle, bien. Si no lo hace, no le obligues. Ya lo hará.
  • Correa sin tensión. Toda tu energía y muchas cosas más se traspasan a través de la correa. Es nuestro cable comunicativo con el perro, y si nunca debe haber tensión, este día menos. Entiendo que llevarla te genere confianza de que si pasa algo, puedas recuperar el control, pero realmente ese control sería negativo si das un tirón. Lo ideal sería incluso poder quitarle la correa, pero si no puedes, debes sólo sostenerla, NUNCA tensarla. Así que ensayar el momento de la presentación entre el perro y el bebé antes de que nazca es la idea perfecta para ponernos en situación y actuar bien el día de la presentación. La recuperación la podrás guiar con comida. Te recomiendo usar una larga, como mínimo de 2 metros en adelante. 
  • Refuerza ≠ no fuerces: Sobre todo sé consciente de que la decisión de arrimarse o no es de tu perro. No puedes “arrastrarle” con la correa para que lo haga, ni empujarle con las manos, ni guiarle con comida. Déjale que sea él y sólo él quien decida lo que hacer durante el acercamiento. En el caso en el que la presentación entre el perro y el bebé sea fallida porque no muestre interés, no debes preocuparte ni pensar que no lo va a querer. Tienen toda la vida para estar juntos. Ya lo hará. Pero por si por el contrario sí decide conocerle, asegúrate de llevar premios o lo que más le guste a tu perro para reforzarlo positivamente.
  • ¿Premios comenstibles? Pues todo depende de si a tu perro le motiva la comida lo suficiente y sobre todo, no le sobreexcita. En el momento de la presentación entre tu perro y tu bebé, el protagonista debe ser tu perro, y la presencia de comida puede hacer que «pase olímpicamente» del bebé. Conozco un caso en el que todo iba bien hasta que sacaron la comida. El perro se excitó tanto por los premios que directamente ignoró al bebé. Eso sí, puedes llevarlos por si necesitas “in-extremis” interrumpir la interacción de una forma amable, distrayendo la atención de tu perro sobre el bebé hacia ti con los premios. Debes valorarlo bien.
    • También dependerá del vínculo y la confianza que tengas con tu perro. Si tu voz y tu contacto son suficientes, yo no elegiría la comida en este momento. 
  • A casa todos juntos: Sería genial que pasados unos minutos del momento de la presentación entre tu perro y tu bebé, y sólo cuando tu perro haya conseguido una relativa relajación en presencia del recién nacido (que ya no esté todo el tiempo encima del bebé, que busque tu atención, olfatee otras cosas…etc) iréis a casa todos juntos. 

Ahora sí, DENTRO VÍDEO (pincha en las palabras subrayadas en verde).

Analizando la presentación de Dólar y Bela con su bebé

Aún me emociono cada vez que veo este video. Es uno de los momentos más especiales que he vivido de todo este proceso. Y sólo se consigue si tienes CONFIANZA en tu perro y se lo transmites dejándole hacer por sí mismo (ésto es lo que te decía en la guía del embarazo de tener un perro independiente y seguro de sí mismo).

Voy a daros el ejemplo de que incluso yo, que había visualizado cientos de veces este momento, cometí errores, fruto de la emoción y los nervios. Aún así todo salió bien, pero si te sirven mis errores para que tú no los cometas, me doy por satisfecha.

cómo hacer la presentación entre perro y recién nacido

¡COMENZAMOS!

  1. Espacio exterior y neutral. Conocido para los perros. (Ese es el parking del barrio donde vivimos)
  2. Aunque no se ve, venían de un paseo cortito porque estábamos a casi 30ºC y eran más de las 14.00 horas.  
  3. Saludo a papá y mamá. Estaban deseosos de vernos y nada más bajar del coche de mi madre, ya venían desesperados por saludarnos de nuevo. Pasaron cerca de 15 minutos hasta que estuvieron más calmados y pudimos sacar al bebé.
    1. DATO EXTRA: Persona que os ayude a lo que sea (en este momento fue mi madre, con quien se habían quedado los días de la hospitalización). 

Si podéis, no os enfrentéis a este momento completamente solos. Si todo va bien, siempre puede grabar el momento como hizo mi madre, y la verdad, es un recuerdazo. ¡Te lo aconsejo! Y te servirá para analizar tranquilamente los matices de la presentación.

  1. Las dichosas correas: Como habrás visto, al principio del vídeo, les estaba manteniendo calmados en sentado, pero en cuanto vieron a mi chico sacar la silla del coche…allá fueron como locos…y ¡no les dí más correa!. Aún teniendo 2 metros con cada uno, tenía el “gurruño” hecho en la mano y no me di ni cuenta. De hecho se aprecia como “me tiran” un poco. SEGUNDO ERROR. ¿Quieres saber cuál fue el primero? 
  2. Pues que antes de grabar, mi chico y yo nos acercamos a medio camino de donde venía mi madre con los perros (serían 15 metros). Al regresar al lugar donde estaba el coche a la sombra y con las puertas abiertas) Dólar comenzó a tirar de la correa con demasiada ansia. Después asumí que había olido al bebé, y por eso tuve que soltar su correa y dejarle llegar a él. Entró, olisqueó y se salió. ¿Por qué hizo eso? Pues probablemente porque conoció ese olor el día anterior con la ropita de la primera puesta que les llevó mi chico. No pasó nada malo. Además estaba tan contento de volver a vernos, que salió enseguida según revisó el interior, pero fue un momento imprevisto en mis planes, que por otro lado, me gustó, porque pude descubrir la delicadeza de Dólar al olisquear.
  3. Sillita del bebé al suelo (bien), pero perros sin autocontrol (mal). Hubiera estado mejor que se hubieran mantenido tranquilos, pero como te he contado, ya lo habían medio visto dentro del coche y estaban deseosos. Además yo elegí no controlar con órdenes la escena y dejarles decidir. Hubiese estado genial que en la sillita hubiera premios ocultos para que hicieran olfato y/o hubiéramos puesto un par de juguetes conocidos para ellos…pero…en casa del herrero… En fin, se nos olvidó. Esa es la verdad. Así que no olvides meterlos en la bolsa del hospital para tenerlos a mano en tu regreso. 
  4. Tono tranquilo, positivo, alegre, voz aguda, caricias…En definitiva hacer refuerzo social si no hay comida (como en nuestro caso): “por todo lo que sea acercarte al bebé de forma tranquila, te pasan cosas buenas”.
  5. Adultos siempre cerca físicamente para supervisar y regular el contacto (se puede apreciar cómo mi chico retira sutilmente en una ocasión el hocico de Dólar de la cara del bebé porque no paraba de chuparle, y si no le apartas, no tiene fin.
  6. Y por si no te habías dado cuenta, ilusión, alegría, oxitocina y amor a raudales.

Como ves son muchos puntos en los que estar pendientes en la presentación, nada es casual. Y en mi caso, (otro fallo) no estaba entrenado, pero sí planeado. Es fundamental la planificación y el ensayo de todo esto para no dejarlo al azar.

Y si no sale bien…¿Qué hago?

Pues lo primero es mantener la calma y no castigar al perro. Si por lo que sea el encuentro no es como te esperabas, no te preocupes. Todo llega.

Si sigues los consejos que te he dado, no puede salir nada mal, pero puede que: 

  1. El perro no le haga demasiado caso al bebé y/o le evite.

 En ese caso, es necesario que sepas que tendrás que darle tiempo y espacio a tu perro. Sin agobios ni prisas. Riñonera con premios puesta / a mano siempre para reforzar cada acercamiento.

  1. También puede ocurrir que se asuste y ladre al pequeño humano o por excitación en sí, así que lo que harás en este caso será: 
    1. Recuperar la atención de tu perro
    2. Separarnos en dirección opuesta al bebé haciendo que el perro nos siga amablemente (no arrastrarle ni tirar de la correa)
    3. Premiar su acercamiento a ti y ofrecerle tu serenidad. Buscarás un momento de calma junto a tu perro para volver a intentarlo. No queremos que el bebé se asuste y llore ni que haya mala experiencia para ellos.
    4. Tomamos distancia y vamos premiando el acercamiento desde la calma.

Estos días las mamás estamos muy sensibles y con las emociones a flor de piel, y que la presentación no sea como esperabas no puede hacer que te vengas abajo. Estoy dando la solución a una reacción inesperada para que os podáis preparar y todo salga como deseas. Las parejas tendrán que ser conscientes de que van a tener que hacer un esfuerzo extra por trabajar la convivencia durante los primeros días.

Creo que mi perro no está preparado para la presentación

Pues por supuesto, no correr riesgos y contar con un profesional que os ayude presencialmente en este momento. Pero no forzar nada. Es preferible retrasar la presentación unas horas o días hasta que podamos cuadrar las circunstancias y TODOS estéis preparados. 

En el caso de contar con un profesional (así lo hago yo), lo ideal es que hayáis tenido varias sesiones previas para que haya podido ganar confianza con tu perro y sea un elemento positivo y neutralizador de las emociones de tu perro. 

Es un momento único en vuestra vida y deberíais confiar plenamente en su buen hacer y no contactar con alguien de forma desesperada. 

Para mí es muy especial poder acompañaros en este momento tan bonito. 

VISITAS EN CASA

¿Cómo gestionarlas con tu perro?

Tanto si lo has trabajado antes como si no, es un punto muy delicado a tener en cuenta. 

 “Sólo eres bienvenido si saludas primero al perro, por favor”.

Ese sería el resumen de lo que te voy a contar, y te aseguro que si volviera a tener otro bebé, no me cortaría un pelo en poner un cartel así en la puerta. Evitaría repetirlo una y otra vez y transmitirá la importancia que esto tiene para mí. 

CONSEJOS DE UNA MADRE “ESCARMENTADA”

    • Que las visitas no sean un obstáculo para tu perro: Si quieres que tus perros se acercan a oler, chupar o simplemente tumbarse cerca del bebé, que les dejen hacerlo. No dejes que todo tu trabajo se vaya a la porra por las creencias erróneas de los demás. 
    • Briefing a la entrada:  comunica a todo el que llegue que preste atención a tu perro tal y como hacían antes y sobre todo, antes que al pequeño humano. 
    • Expendedores de comida: Si puedes, rellena sus bolsillos con premios nada más llegar o deja un cuenco con premios en la entrada para que los perros sean los primeros beneficiados en estos días de tanto trasiego en casa.
    • Si crees que tu perro no está preparado para las visitas en casa, busca otro lugar para reunir a los tuyos. Así lo hice yo.
  • Respira profundo (varias veces) antes de reaccionar mal. Y es que he vivido con mi propia familia y amigos cómo han reaccionado primitivamente protegiendo al bebé de los perros como si fuese una presa para un depredador. 

A pesar de haberles contado qué hacer y qué no hacer, he visto cómo apartaban al bebé en sus brazos de mis perros ante un acercamiento espontáneo, y no les culpo. Cada uno en su casa sabe lo que quiere, pero no todo el mundo lo va a hacer como tú quieres, y te confieso que en estos días, las hormonas te pueden jugar muy malas pasadas.

visitas al recién nacido cuando hay perros

 

 

 

 

 

 

 

  • Humanos de máxima confianza EN TURNOS cuya prioridad sea estar con los perros y después, conocer al bebé.
  • A mi casa sólo venían si eran uno o dos invitados por turno (sólo una mejor amiga, su madre y su hija vinieron juntas siendo tres, pero ellas son de las mías respecto a los perros).
  • Punto de encuentro como PLAN B: En el momento que el número era más, convertimos en nuestro punto de encuentro la terraza del bar del barrio, porque además, nos liberamos de estar preocupados de atender a los invitados y nos pudimos centrar en lo importante: contar cómo nuestro hijo había llegado al mundo, las horas previas, lo que comía y dormía y cómo manchaba de bien el pañal…(ya verás que esos días no hablarás de otra cosa). Además será el moemnto ideal para dejar a tu perro descansar y no perder la costumbre de estar a solas en casa (evitando que desarrolle ansiedad por separación). 

Espero que con estas pautas puedas vivir con total normalidad la presentación en sociedad de tu bebé y que no suponga un paso atrás en todo lo que habías hecho bien hasta ahora.  En muchas ocasiones los perros, que han sido los “niños” de la casa hasta entonces, ahora se vuelven invisibles a los ojos de abuelos, tíos y amigos embriagados por la emoción de un nuevo miembro humano en la familia.

¿EN QUÉ TE PUEDE AYUDAR LA LACTANCIA CON TU PERRO?

Ésta escena tardó un mes y medio en producirse (de izquierda a derecha Patas, Baghee (arriba), Bela pegada a nosotros y Dólar el que más distancia dejaba), pero en cada toma tenía a alguno de los cuatro cerca de mí en este momento. 

lactancia materna con bebé entre perros y gatos

Y no fue casual. Día a día trabajé la lactancia como un momento de relax y calma cerca del bebé. ¿Por qué? porque ellos lo necesitan.

Los primeros días podemos pasar entre 6 y 12 horas al día con el bebé en la teta / biberón, distribuidas de 8 a 12 tomas en 24 horas. Alimentar a tu bebé (bien sea con lactancia materna exclusiva, mixta o de fórmula) es una tarea que puede llegar a ser extenuante, y por ello mi objetivo era convertirlo en un momento a compartir con ellos, ya que durante todas esas horas no “podría atenderles”.

Sin embargo, convertí la lactancia (que a priori es un tiempo de descuento para mis perros y gatas) en un tiempo de atención, juegos, caricias y compañía.

La lactancia será tu aliada en el proceso de socialización 

  • Tómate tu tiempo. Necesitas conocer a tu bebé y asentar la lactancia. 
  • Busca un lugar cómodo y tranquilo de la casa. Si necesitas intimidad, hazlo a solas las primeras veces. No tengas prisa en incluir a tu perro. Lo más importante es que tú y tu bebé estéis a gusto para que se alimente y salga todo bien.
  •  Observa el comportamiento de tu perro durante la lactancia. ¿Está nervioso?, ¿Quiere acercarse?, ¿Pasa de vosotros?, ¿Se queda cerca tranquilo?, ¿Jadea y os mira fijamente? (de ésto último hablaremos después)
  • Ten un objetivo: que te acompañe y esté calmado
  • Puedes invitarle a acompañarte
  • No le obligues a quedarse (puertas abiertas)
  • Capta los acercamientos (reforzando con voz, caricias, premios)
  • La habitación del bebé / sofá de lactancia es un espacio acogedor. Puedes ambientar con aceite esencial de lavanda por sus propiedades relajantes)

Para mí era alucinante cómo ellos (cada uno a su forma y en su momento) me han ido acompañando en este momento. 

CURIOSIDAD: Es muy probable que tu perro muestre interés por la leche del bebé, pues aunque las leches maternas (o maternizadas) de cada especie son diferentes, lo que cambia es la composición y supongo, que les es familiar y atractivo el olor. 

EL DESCANSO DE TU PERRO Y TU BEBÉ

¿Sabes cuántas horas puede descansar tu perro? Se dice que una media de 17 horas, de las cuales entre 12 y 14 horas son durmiendo. Ahora piensa en la nueva vida con el recién nacido. ¿Puede tu perro descansar con normalidad tal y como lo hacía antes?

El descanso en un lugar cómodo para tu perro y durante el tiempo necesario es fundamental para su bienestar mental y físico. 

Cuando tienes un pequeño humano recién nacido, ningún humano descansa como antes y tu perro tampoco. Por eso, al igual que tienes que hacer malabares con la rutina para descansar “entre horas”, tendrás el deber y la responsabilidad de proporcionarle el mejor descanso posible a tu perro. (DESCANSAR NO SOLO ES DORMIR)

la habitación del bebé y el perro

  • Asegura su lugar de descanso en una zona tranquila de la casa
  • No despiertes al perro innecesariamente
  • Crea esas nuevas zonas de descanso con antelación para que se vaya acostumbrando a dormir en otros lugares que no eran los habituales.
  • Dale opción de elegir el sitio que más le guste a tu perro
  • Usa aromaterapia relajante
  • Prueba con los nutracéuticos beneficiosos del sueño
  • Trabaja la calma con sesiones de relajación, masajes o DogaⓇ, como en la foto, en la que estoy inmersa en la grabación de una sesión de relajación guiada con el bebé y los perros para el CLUB Creciendo entre Perros. El descanso puede ser el momento de inclusión en una actividad beneficiosa para todos. 

El Sueño infantil y tu perro

Es muy complicado planear hacer algo durante el sueño de tu bebé, porque las primeras semanas es todo muy cambiante. 

Pero si te haces una idea de la cantidad de siestas diurnas que tiene un bebé y las aprovechamos (algunas) para dedicarle tiempo de calidad a nuestro perro, todo será mucho más fácil. 

Aquí tienes este resumen del sueño de tu bebé hasta que tenga 5 años. 

portabebé según edad

¿QUÉ PUEDES HACER CON TU PERRO MIENTRAS TU BEBÉ DUERME?

  • Dejarle descansar (dormir, estar a solas o practicar la calma)
  • Trabajar su físico y su mente en casa (juegos interactivos, propiocepción…etc)
  • Dar un paseo de calidad a solas con tu perro (si alguien cuida del bebé)

LA SALUD DEL BEBÉ Y TU PERRO

Son muchos los estudios científicos que respaldan los beneficios en la salud de los niños derivados de la convivencia con perros (y gatos).

Me llamó la atención especialmente un estudio de la Universidad de Alberta (Canadá) que desvelaba que la convivencia temprana de perros y bebés mejora y aumenta las colonias bacterianas intestinales (microbiota) encargadas de evitar que el niño desarrolle alergias y sobrepeso. De hecho, se está estudiando implantar estas colonias de origen animal en bebés prematuros y/o nacidos por cesárea, ya que éstos son los que tienen más riesgo de desarrollar estas patologías al no beneficiarse de la microbiota que adquieren el resto de bebés que nacen mediante un parto vaginal. 

También, la pediatra Gloria Colli (según afirma en su blog) en su tesis doctoral descubrió que:

“La exposición a perro o gato durante los primeros años de vida podría ser protector para el desarrollo de alergias posteriores”.

¿Puede tu perro chupar a tu bebé?

Ya lo has leído y no lo digo yo. Lo dicen los expertos. Los riesgos de enfermedad (siempre que haya unas condiciones higiénico-sanitarias correctas) son mínimas y los beneficios muchísimos. 

Mi consejo: Haz lo que te dicte el corazón. Será la mejor opción.

La nuestra fue dejarles hacerlo desde el minuto cero. Tanto fue así, que respecto al momento en el que se conocieron (ya lo has visto) siempre cuento que al bebé le hicieron un “traje de babas”.

Con mucha previsión de que esto sería así, un par de semanas antes Dólar y Bela habían pasado por las buenas manos de su veterinaria para hacerles una exhaustiva limpieza de boca para eliminar la placa bacteriana y reducir al mínimo los riesgos. Riesgos que he decidido asumir con mi bebé y de los que hoy por hoy no me arrepiento.

EL ESTRÉS DE TU PERRO EN LOS PRIMEROS DÍAS

¿Qué puede producirle estrés a mi perro?

  • El propio bebé en sí
  • Llanto del bebé
  • Que estés con el bebé en brazos
  • Interactuar menos o nada con tu perro
  • Que las visitas no le hacen caso
  • Cambios en los paseos
  • Inseguridad y/o miedo nuestro por su interacción
  • Destierros y rechazos
  • Prohibiciones de comportamientos que antes sí podían hacer
  • …y muchas más. 

Al principio mi perra Bela no le hacía apenas caso al bebé en casa, y nos preocupó un poco.  Yo sabía que sería cuestión de tiempo, pero… no tuve un postparto fácil y pasé cerca de seis semanas en las que la mitad del día estaba medicada (un poco grogui), y la otra mitad alimentando al bebé o descansando. Esto significa que no pude “ocuparme” de todo lo que quería. 

En su afán por intentar que Bela fuese más cercana, mi chico reforzó demasiado sus acercamientos… tanto que desarrolló fijación y estrés por el bebé. 

Tardamos alrededor de seis meses en conseguir normalizar su convivencia con el pequeño humano. 

¿Cómo saber si tu perro sufre estrés?

Lo primero es identificar el origen del estrés para poder trabajar el problema. Puedes notar uno o varios de estos síntomas en tu perro.

  • Hiperactividad
  • Jadeo
  • Reacciones desproporcionadas ante estímulos que antes no tenía
  • Utiliza un lenguaje de evitación (y/o apaciguamiento) contínuamente
  • Rascarse más de lo normal
  • Morderse (TOC) y perseguirse la cola
  • Destructividad
  • Vocalizaciones frecuentes
  • Sacudirse y temblar
  • Patológicos: diarrea, seborrea, mal olor corporal y de aliento, apatía, falta de apetito, insomnio, alergias (derivadas de la bajada de defensas que produce el estrés)
  • Tensión en la musculatura
  • y muchas otras… 

En nuestro caso, Bela adelgazó dos kilos en los dos primeros meses del bebé. Comenzó a no descansar suficiente porque estaba todo el día pendiente del bebé. Hacía respiraciones superficiales, lloriqueaba y tenía un comportamiento nervioso y focalizado en su hermano humano (puedes ver los vídeos). Quería estar con el bebé siempre.

No fue hasta que no estuve del todo recuperada que pudimos volver a la “normalidad” y pude centrarme en ellos y reconducir poco a poco la situación. 

Me centré en “sus peores momentos” y eran en los que no hacíamos nada o símplemente estaba amamantando al bebé. Así que elegí que ese momento, fuese “nuestro momento” y le pedía que me trajera un juguete e interactuaba con ella para romper su focalización y positivizar al bebé de una forma más indirecta. 

perros y niños convivencia tranquilaDesde aproximadamente los los seis meses del pequeño humano hasta hoy (aunque tuvimos una recaída sobre los siete meses o así a causa de varias interacciones mal supervisadas por mis familiares), Bela sabe y puede estar tranquila en presencia del bebé. Tolera sus acercamientos y contactos (cada día más y mejores) e incluso ella busca el contacto de una forma mucho más calmada. 

Para esto último déjame darte un consejo que me dió otra mamá. Yo lo tengo presente en los momentos más duros y lo pensé en todo lo que me sucedía también con ellos:

“Son etapas y TODO PASA”

LOS PASEOS DE UNA FAMILIA MULTIESPECIE

Tardé doce días en poder salir a pasear por el campo con el carro, mis chicos y mis perros. Hicimos 3,5 km. Y no fue el paseo de mis sueños. 

Dólar y Bela estaban algo excitados (también era su primer paseo con el carro y el bebé), pero me aferré a los calmantes y me armé de valor porque no podía esperar más. 

Una semana después me atreví a portear (puedes descargarte gratis la guía sobre Porteo con perros) y todo cambió. 

El paseo perfecto

No se consigue de la noche a la mañana, y teniendo en cuenta la variación de factores que habrá cuando tengas a tu bebé, es recomendable que trabajes esto con antelación.

Normalmente los humanos somos de extremos: o paseamos poco o mucho, o no hacemos nada durante paseo, o hacemos demasiadas cosas, así que te voy a contar lo que para mí debe incluir tu paseo para que se un paseo de calidad: 

  1. PASEO HIGIÉNICO (primero sus necesidades)
  2. OLFATO Vertical y horizontal. Cada día un sitio diferente.
  3. NO HACER NADA (sentarnos en un banco: cuidado con estado emocional)
  4. ENTRENO FÍSICO (obediencia, habilidades)
  5. JUEGO (mordedor, cobro)
  6. PASEO EN SILENCIO (sin hablar, sin refuerzos) “a su bola”
  7. VUELTA A CASA (Juego=el paseo acaba pero volver a casa mola)
  8. RELAX: Descanso o ejercicios de calma

¿Cómo conseguir un paseo sin tirones?

Podría hacer un curso sólo para ésto…¿te apuntarías? Es el sueño de cualquier humano. Conseguir un paseo de calidad y sin tirones. Ojalá pudiera enseñarte en unas líneas a conseguirlo, pero te daré consejos de la línea de trabajo que tengo para alcanzarlo:

  • Buena socialización con los estímulos (otros perros, corredores) y el carro
  • Estructura un buen paseo de calidad
  • Saca a pasear a tu perro entre 3 y 5 veces al día ( mínimo 2 horas al día)
  • Utiliza elementos de paseo adecuadas (collar / arnés cómodos y correa de 2 metros como mínimo)
  • Lleva premios y un juguete motivador 
  • Ten un buen vínculo con tu perro
  • Asegúrate de tener una buena comunicación (verbal y corporal)
  • Sal de casa de una forma calmada
  • Acostumbra a tu perro a caminar despacio
  • No sobre excites con frases como: ¡¿Vamos a la calle?!
  • La correa es un elemento de seguridad. No la uses para guiar a tirones
  • Trabaja el paseo al mismo lado siempre para evitar que se crucen
  • Tu estado emocional lo transmites a tu perro
  • No abuses de las órdenes
  • Trabaja la atención de tu perro en ti (por si lo necesitas)
  • Premia sus acercamientos espontáneos
  • Disfruta con tu perro

La lista podría tener unas cuantas líneas más, pero es sólo para que te hagas una idea de que detrás de un paseo sin tirones hay un gran trabajo (en el que puedo ayudarte) para conseguirlo. Además de todo esto, lo ideal es que ya hayas practicado el paseo junto al carro y que sólo si sientes seguridad, te animes a pasear junto a tu perro porteando a tu bebé.

VIAJAR EN COCHE CON TU PERRO Y EL BEBÉ

La logística en los viajes de una familia multiespecie siempre es especial, pero si añadimos a la ecuación un bebé, la cosa se complica “un pelín”.

Nosotros cambiamos un SUV normalito por un coche familiar de 7 plazas (las traseras abatibles) para tener un maletero XXL y espacio suficiente para todos. 

Pero el espacio no es lo importante. Te apañarás con lo que tengas.

Me di cuenta de la problemática cuando varias familias y antiguos alumnos se pusieron en contacto conmigo para comentarme su situación al tener un bebé.

A mi perro no le gusta viajar en coche

Cuando no tienes a nadie que vaya en la parte trasera y ésta es ocupada en exclusiva por tu perro, puede que incluso hayas normalizado sus constantes ladridos, su nerviosismo o incluso sus reacciones desproporcionadas hacia el exterior. Pero cuando en la parte de atrás tiene que ir el bebé en su silla y/o uno de vosotros, la cosa ya resulta más preocupante. Puede asustar e incluso lastimar al pequeño humano.

Algunos consejos para mejorar el viaje con perro y bebé: 

  • No obligues a tu perro a subir al vehículo. Convéncele, guíale y ofrécele tu apoyo.
  • Ensaya en desplazamientos cortos a sitios que le gusten con la silla del bebé puesta (lleva su juguete favorito / snack de larga duración durante el trayecto)
  • Valora usar transportin (positivízalo antes fuera)
  • Limita físicamente (si es necesario por su seguridad) el espacio del bebé con mayas o rejas separadoras homologadas. 
  • Pasa algunos ratos con el coche aparcado y a su lado, refuerza positivamente cada estímulo exterior que aparezca antes de que tu perro reaccione.
 

Te deseo un Feliz Viaje de Familia Multiespecie en el coche… y en la vida.

Puedes descargar este contenido en formato GUíA para imprimir o para guardarla y leerla cuando quieras

guia gratis creciendo entre perros recien nacido presentacion entre perro y bebe

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